El uso de plásticos desempeña un papel clave en la transición hacia una sociedad más verde y sostenible en los países desarrollados, así como un potencial para evitar mayor contaminación en los países en desarrollo. Sin embargo, del plástico se derivan diversos problemas ambientales, tales como las emisiones en su producción, la gestión de residuos, la basura y fugas a la naturaleza, y las bajas tasas de reciclaje. Es por ello necesario considerar el desarrollo y uso de bioplásticos. En otras palabras de “plásticos” que pueden ser biodegradados y producidos a partir de biomasa, o ambos, como una solución potencial para reducir la dependencia de los recursos fósiles y los impactos ambientales de los desechos plásticos. Hay revisiones serias que incluyen estándares industriales y estudios de evaluación del ciclo de vida, y discusiones sobre algunos de los desafíos actuales asociados con estos materiales.
Países desarrollados ya están encaminados hacia nuevas políticas públicas relacionadas a las nuevas tecnologías y hábitos de consumo alrededor de los plásticos. "[Transformar] la Unión Europea en una sociedad justa y próspera, con una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva donde no haya emisiones netas de gases de efecto invernadero en 2050 y donde el crecimiento económico esté disociado del uso de los recursos", esto se describe en el plan del Pacto Verde Europeo de la Comisión Europea para abordar los desafíos ambientales hacia 2050 [1].
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) destaca la importancia de trabajar hacia una economía sostenible, con el uso eficiente de los recursos naturales, y con poco o ningún desperdicio ni contaminación [2]. Algunos de los desafíos relacionados con la producción de plástico son su uso inadecuado y la polución, que van desde artículos de un solo uso, sobreembalaje y basura, hasta microplásticos, altas huellas de carbono y falta de etiquetado adecuado.
La siguiente lista de algunos bioplásticos, indica su origen y biodegradabilidad. En la tabla “y” significa “sí”, y “n” significa “no”, “y/n” se refiere a que ambos criterios son válidos [3].
La economía circular es una forma de producir y consumir que tiene por objetivo mantener los recursos en uso durante el mayor tiempo posible y reciclarlos al final de su vida útil, disminuyendo así los residuos. Este enfoque contrasta con la economía convencional y la economía lineal, donde los recursos se extraen, se convierten en productos, se utilizan y se tiran como residuos. El enfoque de Economía Circular está diseñado considerando la adaptación en la fabricación y el diseño de productos, al igual que el desarrollo de la gestión de residuos hacia una valorización diferenciada de los recursos. Todo ello implica la participación social activa, misma que ha sido la parte más difícil debido a la escala y las limitaciones económicas dentro de la gestión adecuada de los residuos. El mejor desperdicio es el que no existe, sin embargo se debe considerar un enfoque más acertado. Los bioplásticos son una alternativa prometedora como catalizador para lograr el objetivo de mantener productos versátiles y a su vez reducir la huella ambiental.
En concreto, el plástico biodegradable es un material polimérico que cumple con ciertos estándares oficiales de biodegradabilidad, donde cierto grado de deposición debe verificarse científicamente dentro de un marco de tiempo definido y bajo condiciones específicas. Del mismo modo, un compostable es un plástico que se biodegrada en instalaciones de compostaje industrial y debe seguir ciertos estándares gubernamentales o industriales.
La página web European Bioplastics informa que la producción mundial de bioplásticos en 2018 fue de aproximadamente 2 Mt, mientras que la producción mundial de plásticos fue de alrededor de 360 Mt [4]. Además, se espera que el mercado mundial de bioplásticos crezca constantemente en los próximos cinco años, con un aumento de volumen cerca del 40%. El informe de Markets And Markets sobre el mercado de bioplásticos y biopolímeros [5], estimó que el tamaño del mercado global de bioplásticos y biopolímeros es de casi USD 11.5 mil millones en 2022, con una proyección hacia 2027 casi de USD 27.3 mil millones, a una tasa compuesta anual de 18.9%. Estas cifras consideran los cambios sociales en cuanto a los efectos de los plásticos en el medio ambiente, el potencial industrial, las regulaciones de gestión de residuos, las políticas gubernamentales favorables, las preocupaciones de salud humana, los costos de energía y la huella de carbono, entre otros.
Referencias.
- Comisión Europea. el Pacto Verde Europeo COM(2019) 640 final; Comisión Europea: Bruselas, Bélgica, 2019
- Plataforma de Conocimiento de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Disponible en línea: https://sdgs.un.org/2030agenda (consultado el 5 de abril de 2021).
- Di Bartolo, A.; Infurna, G.; Dintcheva, N.T. Una revisión de los bioplásticos y su adopción en la economía circular. Polímeros 2021, 13, 1229. https://doi.org/10.3390/ polym13081229
- Bioplásticos europeos. Mercado de bioplásticos. Disponible en línea: https://www.european-bioplastics.org/market/
- Informe de mercados y mercados sobre Bioplásticos y biopolímeros Market https://www.marketsandmarkets.com/Market-Reports/biopolymers-bioplastics-market-88795240.html
- Gaceta Oficial de la Ciudad de México. 24 de Septiembre 2012. Logotipo, Compostable de la Ciudad de México y los Lineamientos para su adecuado uso. http://www.sadsma.cdmx.gob.mx:9000/datos/storage/app/media/gacetas/GOCDMX_21-09-24_DGEIRA.pdf