Desde hace más de 10 años las costas del Mar Caribe se han visto afectadas por la gran cantidad de sargazo que llega desde mar adentro, ocupando un lugar central en la vida de miles de personas.
Pero ¿qué es el sargazo?, ¿de dónde vienen estas algas?, ¿por qué llegan estas cantidades a la playa?, ¿qué se puede hacer con ellas? y muchas otras preguntas cobran especial relevancia, sobre todo cuando hablamos de los impactos sociales y ambientales del Cambio Climático.
Las consecuencias, tanto económicas como ecológicas a causa del sargazo, en una región tan importante como es el Mar Caribe, deben ser atendidas con base en evidencia científica, así como con el apoyo de autoridades y de las comunidades afectadas, lo cual incluye el sector turístico y comunidades costeras.
En BioPlaster Research trabajamos para desarrollar un ecosistema productivo impulsado por la innovación científica con el objetivo de un aprovechamiento inteligente, responsable y sustentable de este recurso natural compartido que sume al manejo eficaz y efectivo de estas macroalgas.
¿Qué es el Sargazo?
El sargazo es una macroalga parda del género Sargassum, del cual se han identificado más de 350 especies alrededor del mundo (Guiry & Guiry, 2019).
Las dos especies que se encuentran en el Mar Caribe son Sargassum natans y Sargassum fluitans, las cuales se describieron científicamente hace poco menos de 200 años en el Océano Atlántico Tropical (Agardh, 1821; Gaillon, 1828; Børgesen, 1914).
Estas dos algas son únicas dentro del género Sargassum, ya que son capaces de completar todo su ciclo de vida flotando en la superficie del mar, también llamadas holopelágicas (de “holow” ‘todo’, y “piélagos” ‘mar’) (Smetacek & Zingone, 2013), por lo que nunca han estado fijas al fondo (no tienen órgano de fijación como otro tipo de algas, como el kelp).
¿De dónde viene el sargazo?
De manera natural estas algas se distribuyen en la región central del Océano Atlántico, entre Las Bahamas y las islas Azores (Deacon, 1942; Franks, et al., 2016), formando una zona llamada Mar de los Sargazos.
Debido a la extensión de área donde se encuentran estas algas, son importantes zonas de crianza, refugio, hábitat, alimento y transporte para una gran diversidad de peces, moluscos y crustáceos (Farrel et al., 2014; Huffard et al., 2014), dotando al ecosistema oceánico de ambientes propicios para la conectividad entre ecosistemas y entre especies.
De manera sin precedente, a partir del 2010 se han presentado arribazones inmensos de estas algas, se cree que las condiciones actuales de la región causan que estas algas se multipliquen de manera acelerada. La región se ve afectada por la gran cantidad de nutrientes provenientes de fuentes tanto lejanas como cercanas al Mar Caribe. Desde los afluentes del Río Amazonas y el Río Niger, la industria minera en Centroamérica y la gran cantidad de agua residual proveniente de los desarrollos costeros en las costas.
Arribazones masivas de sargazo
La llegada de sargazo en las costas del Mar Caribe y el Norte del Golfo de México en pequeñas cantidades ocurre de manera natural desde el punto de vista ecológico. La degradación del sargazo en las playas contribuye al ciclo biogeoquímico, aportando nutrientes a las aguas costeras (Olabarria & Vázquez, 2018). En el año 2011, se registraron los primeros eventos de llegada masiva de sargazo en las playas del Mar Caribe, iniciando en las Antillas menores (Norte de Venezuela), lo cual trajo consigo grandes afectaciones locales, principalmente a los sectores de turismo, pesca y medio ambiente.
Entre abril y agosto del 2011, al norte de Brasil aparecieron las primeras agregaciones masivas de sargazo, con máximos en julio, regresando a niveles bajos en octubre.
Para los años 2017 y 2018, el crecimiento de sargazo se calculó en 15 millones y 32 millones de toneladas, respectivamente. Esta concentración ha recibido el nombre de Gran cinturón de sargazo en el Atlántico (The Great Atlantic Sargassum Belt) (Wang et al., 2019), el cual alcanzó extensiones máximas cercanas a los 9,000 km, desde las costas africanas en Sierra Leona hasta el Golfo de México.
A pesar de que el Mar de los Sargazos mantiene poblaciones en el Océano Atlántico, la probable fuente de sargazo asociada a las arribazones masivas durante el año 2011 se localiza al noreste de Brasil, transportando las algas hacia el Mar Caribe vía la corriente del Norte de Brasil, la Corriente de Guyana y la Corriente de las Antillas (Frank et al., 2012)
Importancia Ecológica
La Alianza del Mar de los Sargazos busca la conservación y protección de este singular ecosistema por considerarlo como 'un bosque tropical dorado que flota en la superficie del Océano Atlántico, un oasis de vida marina y el único mar sin costas, el cual contiene especies endémicas como Sargassum y muchas otras que se han adaptado especialmente a la vida en medio de este dosel flotante' (Laffoley, 2011).
Se conocen al menos diez especies únicas en estos parches: el cangrejo del sargazo (Portunus sayi), camarón del sargazo (Latreutes fucorum), pez aguja (Syngnatus pelagicus), anémona del sargazo (Anemonia sargassensis), babosa del sargazo (Scyllea pelagica), caracol del sargazo (Litiopa melanostoma), crustáceos, gusanos y la especie más icónica de este hábitat el pez del sargazo (Histrio histrio) (Coston-Clemens et al., 1991; NOAA, 2002).
En la región del Mar de los Sargazos se han identificado cerca de 150 especies de invertebrados que viven y necesitan de estos parches para mantener a sus poblaciones ya la de otros peces que los visitan en busca de refugio o alimento (Fine, 1970; Trott et al., 2011).
Al ser un ambiente con gran variedad de especies, organismos internacionales tan importantes como la Comisión del Mar de los Sargazos y la Comisión Internacional para la Conservación del Atún del Atlántico (CICTA o ICCAT en inglés) consideren de vital importancia estos ambientes para especies de gran tamaño como atunes, pez espada, marlin, pez vela y diversas especies de tiburones (ICCAT, 2005; ICCAT, 2011).